Nuestras relaciones, conexiones y posibilidades se tejen a través de frecuencias vibratorias, y justo eso son los números: frecuencias y patrones que han marcado nuestro vínculo con el mundo, y que diferentes civilizaciones ancestrales utilizaron para explicar y construir una relación con él, por ejemplo, desde la ciencia, el arte y la arquitectura.
El poder de los números ha sido estudiado ampliamente a lo largo de la historia y se les ha atribuido una relación especial con la espiritualidad, lo que se conoce más comúnmente como numerología sagrada.
El filósofo y matemático Pitágoras, tenía la concepción que TODO ERA NÚMERO, y por eso decidió estudiar todas sus formas, representaciones e infinitas posibilidades. De ahí precisamente viene la numerología pitagórica, la cual establece que en el Universo existe un orden y que es a través de los números que se puede comprender la forma que toma la vibración y que se materializa a través de onda y partícula.
Según Pitágoras los ciclos progresivos que rigen todo el Universo son predecibles y para medirlos se utilizan frecuencias entre el 1 y el 9.
En este sentido, ideó una forma de entender a los seres humanos, a través de aspectos numéricos y geométricos en sus campos físico, mental y emocional. La tabla pitagórica permite convertir las letras en números y cada uno de estos valores están relacionados con la vibración de cada letra.
Pero no solo Pitágoras estableció una relación y significado con los números: culturas como la egipcia, la india y la mesopotámica entendieron el poder de su vibración (energía), e incluyeron combinaciones matemáticas en sus rituales y monumentos.
En el caso de Egipto, por ejemplo, la importancia que le daban a los números se ve reflejada en sus pirámides. Según la investigadora Cora Dukelsky, en el texto La influencia de las creencias religiosas en el arte egipcio, las pirámides fueron construidas obedeciendo a una “forma geométrica pura” (casi perfecta), cuidando su ubicación respecto al Universo y sus cuatro puntos cardinales.
Los números y el Universo
Todo en el Universo está conectado a la misma red neuronal donde todo es energía, donde todo es vibración. Es un campo unificado de energía al que yo llamo Campo Akasha, pero que algunos denominan Red de Indra, el Primordial ¡Om! O música de las esferas.
En el artículo Música de las esferas: la armonía de los planetas del Sistema Solar, del portal Cultura Colectiva, se explica que según la escuela pitagórica, los cuerpos celestes producen sonidos, tal y como lo hacen los cuerpos físicos en la tierra, ¿esto qué quiere decir?
Que al Universo ser una vibración y movimiento constante, produce melodías y es a esto a lo que se le denomina Música de las esferas. Sin embargo, como lo indicaba Pitágoras, aunque este sonido SIEMPRE está presente, no se puede escuchar.
¿Sabes? El sonido al igual que los números obedecen a frecuencias vibratorias y patrones que se repiten, como si se tratara de una espiral de la propia consciencia. Los patrones numéricos que representamos a través de las matemáticas, por ejemplo, nos han permitido comprender el Cosmos y sus astros.
Sí. Todo en el Universo es Consciencia, es Inteligencia que se mueve a través de la vibración, pero que además genera patrones. Justo allí es donde se registran todos los datos y la información primaria de lo que somos y de lo que hacemos parte.
¿Cómo funciona esto? Como un Universo fractal.
El matemático Benoit Mandelbrot, indicó en su momento que la naturaleza casi siempre viene en fórmulas irregulares… y justo eso son los fractales, estructuras que se repiten a distintas escalas y que van hasta el infinito.
Es casi como si en un objeto se contuviera en el mismo objeto pero a menor escala en un patrón ilimitado.
Así, las matemáticas en términos de fractal, inspiraron teorías desde la medicina, la genética, la ingeniería y el estudio mismo del cosmos.
Numerología sagrada y el poder del número 3
Además de la ciencia, se relaciona con la espiritualidad de diferentes culturas alrededor del mundo, quienes lo asocian con la santísima trinidad (en el cristianismo) y el triángulo sagrado (de las creencias egipcias). También se le relaciona con los seres de luz y con el Chakra Ajna, ubicado justo en medio de las cejas. Este último representa nuestra relación con el sistema nervioso, la intuición y nuestra percepción sobre el mundo y sobre nuestro interior.
Pero, ¿cómo es que el 3 es un número tan poderoso?
Nikola Tesla, uno de los grandes inventores del siglo XIX se obsesionó con la secuencia 3, 6, 9. De hecho, seguía una rutina de organización en su cotidianidad. Algunos cuentan que caminaba alrededor de un lugar durante 3 ocasiones antes de entrar, que se alojaba en habitaciones de hotel que fueran divisibles por tres, que limpiaba sus platos con 18 servilletas y que todo lo hacía en conjuntos de 3. Pero además, creía en las triadas que conforman el mundo:
Unidad, perfección y creación. Espíritu, cuerpo y mente. Cerebro, corazón y pulmones.
Esta percepción de Tesla y la importancia que le dio, se enfocaba en la energía universal que se manifiesta en el mundo físico. Pero, ¿qué pasa por ejemplo con el número 9? Según Tesla este moldea la totalidad y la nada de forma simultánea:
Si sumas todos los números del 1 al 9 el resultado es 45 y 4+5 es igual a nueve. Un año tiene 525.600 minutos, lo cual también suma 9.
Así fue creado el método 369 de Tesla, relacionado con la Ley de atracción.
Numerología y Ley de Atracción
Todo en el Universo está articulado a través del mismo campo unificado de energía y se rige por leyes como la de Atracción: la cual dice que todo lo que piensas y sientes es justo lo que estás atrayendo a tu vida.
Sí. La ley de atracción es un aspecto clave dentro del proceso de manifestación de la realidad, pero solo si permites que la energía fluya y se enfoque en el punto de atención correcto. Esto genera que a través de tus pensamientos y de la forma como te sientes, emites las frecuencias vibratorias precisas que entran en resonancia con el entorno.
Cómo ponerlo en práctica
Siguiendo el método Tesla, quiero compartirte esta corta y práctica actividad que deberás realizar durante 45 días (4+5=9):
Elige una intención: pon tu atención en un deseo del alma que realmente quieres lograr y visualízalo como si ya lo estuvieras viviend
Realiza una afirmación positiva que lo involucre con precisión: repite este deseo casi como un mantra, desde el “Yo soy ” “Yo elijo” “Yo declaro” “Yo decreto”.
Toma lápiz y papel y escribe tu afirmación positiva de la siguiente manera: 3 veces cada mañana, 6 veces cada tarde y 9 veces cada noche.
Finalmente, no te obsesiones con la necesidad de un resultado, al hacerlo estás bloqueando tu energía para que fluya a la materialización de eso que tanto quieres.
“Si solo supieras la magnificencia del 3, 6 y 9 tendrías las llaves del Universo”, Nikola Tesla
Cuéntame, ¿crees en el poder de los números? ¿Te animas a poner en práctica este método de manifestación y atracción? Te leo…
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