Preparar nuestra energía y conectar con el todo para una gran apertura de consciencia es una oportunidad que llega con la apertura de cada portal: no importa si es un punto geográfico en la Tierra, o un evento astrológico u astronómico. Recuerden que TODO ES UNA CONEXIÓN, TODO ES UN VÍNCULO…
Representan una conexión universal: algunos son momentos astrológicos, otros eventos astronómicos, y otros lugares en la Tierra que han sido, incluso, hogar de culturas milenarias. Pero ¿qué tienen en común? Que son vórtices de ingreso y salida de energía sutil y reciben el nombre de PORTALES ENERGÉTICOS.
En este artículo quiero contarles qué son, y cómo estos puntos de gran valor energético representan puertas de entrada y salida de información que impacta nuestra vida.
Pero, primero, devolvámonos un poco. Vamos hacia la comprensión del campo cuántico de energía: esa red donde todos nos conectamos, y donde todo es una gran consciencia manifestada a través de centros energéticos que se están creando en la vibración, y que podemos ver materializados, por ejemplo, en el mundo físico.
Según el neurocientífico, Dr. Joe Dispenza, el campo cuántico, es un campo invisible de energía que existe más allá del espacio y del tiempo, es infinito y está hecho de vibración, de frecuencia, de información y de consciencia.
Justamente, esa energía de la que hablamos, la que lo conecta todo y que es vibración, tiene la capacidad de expresarse a través de las espirales de vida, que van desde nuestras partículas subatómicas hasta el Universo ¿Cómo? expandiéndose y generando grandes infusiones de información, que nos permiten crear vínculos energéticos. Ahí se produce el entrelazamiento cuántico, lo que nos permite compartir información que pueden llegar hasta nuestro sistema y reprogramarnos.
El bestseller y experto en Ciencia y Espiritualidad, Gregg Braden, dice que estamos emergiendo de ese campo constantemente y, justo ahí, existen todas las posibilidades ¿por qué? Porque en el campo ya todo ha sido creado como un potencial de energía que pulsa, que vibra y que finalmente se representa como materia física.
Pero, ¿qué tiene que ver esto con los portales energéticos? Que al entender cómo funciona el Campo Cuántico, podremos entender que los vínculos energéticos que creamos entre nosotros y el Universo generan un flujo de información constante que puede amplificarse y que pasa por vórtices, es decir por PORTALES ENERGÉTICOS.
Cada vez que conectas con un portal estás generando un vínculo con él.
El magnetismo entre el Sol y la Tierra
En el año 2012, el investigador de la Universidad de Iowa, Jack Scudder, realizó un estudio financiado por The National Aeronautics and Space Administration (NASA), y descubrió que cuando el campo magnético de la Tierra lograba conectarse con el Sol, se generaban portales: los puntos X.
El sitio web Ciencia de la NASA, indica en el artículo Portales ocultos en el campo magnético de la Tierra, publicado en julio de 2012, que Scudder descubrió espacios que creaban “un camino ininterrumpido” desde la atmósfera terrestre, hasta la atmósfera solar, a 150 millones de kilómetros de distancia. Y que, a través de estos portales, fluye gran cantidad de partículas energéticas, produciendo, incluso, auroras polares.
“Estos portales magnéticos se cierran y se abren docenas de veces al día (…) La mayoría son pequeños y de corta duración; otros son muy grandes y duran más tiempo”. Portales ocultos en el campo magnético de la Tierra, en Ciencia Nasa.
Pero ¿cómo ubicar estos puntos X teniendo en cuenta que son inestables e invisibles en su mayoría? La clave podría estar en las señales que han dejado algunas culturas ancestrales.
Según indica Gregg Braden en el capítulo Portales del Universo, de la serie Civilizaciones Antiguas, existen relatos que han pasado de generación en generación indicando algunos lugares en la Tierra donde, teniendo en cuenta algunas condiciones cosmológicas y momentos muy específicos del año, se podría transitar entre dos mundos.
Hace poco menos de un mes — EN SEPTIEMBRE de 2021— experimentamos el portal 555, un vórtice energético dispuesto para generar este transitar hacia el cambio, y hacia la apertura de nuevos caminos.
Pero ¿cómo funcionan estos portales energéticos?
El investigador Billy Carson, fundador de 4biddenknowledge Inc, explica, también en el capítulo Portales del Universo, de la serie Civilizaciones Antiguas, que los portales estelares funcionan a través de una gran red cósmica, la red que comunica cada galaxia en el Universo. Cuenta, además, que mientras los planetas rotan generan nodos, los cuales van formando cuadrículas. Así que cuando estos se alinean se forma un portal.
Según el Centro de Servicio Planetario Uksim, finalizando la década de 1980, se encontró evidencia de la existencia de centros planetarios de gran voltaje, es decir, puntos de entrada y salida de energía dispersos, de forma física, por toda la Tierra.
Alrededor del planeta se encuentran puntos geográficos con gran connotación ancestral y espiritual, sobre los cuales se imponen estructuras arquitectónicas sagradas propias de cosmovisiones antiguas, que representan vórtices (portales) fundamentales para los procesos de conexión con el todo, de sanación interior, de reprogramación celular y de expansión de consciencia, de los cuales les hablé en un artículo anterior: los 7 chakras de la Tierra.
La energía del padre Sol y de la hermana Luna
Cuenta la leyenda Maya que el Sol y la Luna huyeron de la destrucción del mundo, abrigados con el caparazón de una tortuga, para que la Luna pudiera realizar su recorrido y cumplir con sus ciclos protegida.
La cultura Maya es una de las civilizaciones mesoamericanas más importantes del periodo precolombino, y una de las más representativas para la conexión con nuestra ancestralidad. Para los Maya, el Sol, la Luna, las estrellas y los planetas eran de gran importancia, hasta el punto de lograr destacarse en el campo de la astronomía, con observaciones de gran exactitud.
Concibieron y veneraron al padre Sol como un dios, y entendieron la Vía Láctea
como una ruta que conectaba la vida y la muerte.
José Manik, representante Maya, compartió en la conferencia Expo Vida Consciente en 2019, la existencia de 23 calendarios creados en esta civilización, y uno de ellos, precisamente, es el calendario del Sexto Sol que lleva los símbolos de la Luna y el Sol, y representa un portal hacia la transformación, hacia el inicio de una nueva era que empezó en diciembre 2012.
Sí. La Luna y el Sol representan ciclos que las cosmovisiones antiguas no solo aprendieron a identificar, sino también a conectar. Estas determinan cierres y aperturas de portales que pueden darse por periodos de 24 horas, semanas, meses, años, etc.
Estos se representan a través de eclipses, solsticios, equinoccios y demás eventos donde los astros son protagonistas.
Hace menos de un mes nos conectamos, por ejemplo, con la Super Luna. Un evento astronómico con energía poderosa, que representó la apertura de un portal. Quizá sintieron efectos físicos y / o emocionales de ese gran sacudón energético que nos mostró una resistencia lista para soltarse y fluir. Fue un día perfecto para manifestar, propio de un fenómeno que no se observaba hace más de 400 años.
Pero, este gran movimiento energético de OCTUBRE donde los astros que tanto veneraron y estudiaron los mayas son protagonistas, no termina ahí, se viene, también, una nueva apertura: El 21 experimentaremos un movimiento de consciencia donde el padre Sol nos guiará a una gran oportunidad de comprensión y reconexión interior, de la cual les hablaré en mi próximo artículo: ¡Atentos!
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